Nuestras conexiones con las marcas son mucho más que una relación funcional o de practicidad. Si bien nuestro primer acercamiento suele ser la satisfacción de necesidades básicas, construimos nuestras lealtades hacia las que forman vínculos en diferentes niveles, con las que logran llenar nuestras necesidades emocionales.

Para el marketing y branding, descubrir cómo conectar con los usuarios se ha convertido en una tarea en sí misma, ya no se trata sólo de hard sell y números, intentamos construir una relación duradera, cómo dicen –powerful brands touch somenthing else, something we can’t see on the surface-,  por eso existen herramientas que nos ayudan a convertir las conexiones psicológicas con las audiencias, en los atributos indicados para crear productos o servicios relevantes y diferenciados, una de ellas es el NeedScope.

Básicamente, NeedScope es un sistema de investigación que utiliza arquetipos psicológicos y procesos de proyección para encontrar las necesidades emocionales de los mercados y así contemplarlas dentro de las estrategias de marca y comunicación. Esto nos permite la posibilidad de segmentar nuestro mercado –o nuestro producto- dentro de las diferentes necesidades de los consumidores, ampliando el alcance de la marca a través de las emociones.

“Si bien nuestro primer acercamiento suele ser la satisfacción de necesidades básicas, construimos nuestras lealtades hacia las que forman vínculos en diferentes niveles, con las que logran llenar nuestras necesidades emocionales.”

Para lograrlo, necesitamos tener presentes los beneficios funcionales y emocionales de nuestra marca o producto y de qué manera éstas satisfacen las necesidades emocionales de las audiencias. Por eso, ¿cuáles son los puntos a revisar cuando necesitamos auditar los atributos de nuestra marca?

1. Público clave: conocer a nuestros usuarios/consumidores, es probablemente una de las tareas más importantes; saber qué les emociona, cuáles son sus aspiraciones, sus sueños, qué necesidad de aventura, seguridad, afecto, etc. están llenando con nuestro servicio/producto, es el primer paso para desarrollar un buen Needscope. Para facilitar esta tarea, encontramos los arquetipos de personalidad de Jung, que ayudarán a definir la personalidad de tus consumidores y de la marca.

2. Key drivers: los factores clave que impulsan la marca, como pueden ser datos duros como cosas de costo/beneficio o también percepciones cualitativas, como calidad de vida de los empleados. Estos van cambiando con el tiempo, por lo que es necesario revisarlos constantemente.

3. Posicionamiento: los productos no se posicionan en el mercado, si no en la mente del consumidor. Queremos saber cómo nos identifican, porqué nos compran/consumen y porqué se quedan con nosotros sobre la competencia.

4. Fortalezas y debilidades: hacer una auditoria de cuáles son nuestros puntos a favor y cuáles son las variables con las que no estamos cumpliendo, nos ayudan a delinear un camino hacia las soluciones.

5. Atributos de imagen: para conectar con las emociones, es necesario reflejar nuestros hallazgos de manera consistente en toda la comunicación.

6. Experiencia de usuario: también conocido como customer journey o recientemente user journey. Cuál es el recorrido de los usuarios y qué experiencias positivas o negativas les produce utilizar nuestro producto/servicio, es uno de los puntos más importantes, ya que esto puede determinar, incluso, si cumplimos o no con la promesa de marca. Esto puede ser desde un sitio web –el término es ampliamente utilizado en este contexto digital- hasta en publicaciones y tiendas.  Para hacer una experiencia memorable debes conocer cuáles son las metas, motivaciones, problemas y  necesidades u objetivos quieren cumplir los usuarios al acercarse a tu marca.                    

Encontrarte con las emociones puede ser más difícil de manejar que las estadísticas y reportes de venta, pero crear un diferenciador emocional en tu marca y desarrollarlo, establecerá conexiones fuertes que, a la larga, generará mejores resultados.

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HyperBrand es una firma de consultoría en diseño estratégico que combina metodologías de innovación, herramientas de negocio e ideas no convencionales, para diseñar conceptos de negocios que respondan a las necesidades de usuarios en constante cambio.